Nº 33. — AFECCIONES DEL CORAZÓN — HIDROPESÍA

Nº 33. — AFECCIONES DEL CORAZÓN — HIDROPESÍA

Max Heindel y Augusta Foss de Heindel – El Mensaje de las Estrellas

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Buenos aspectos: Júpiter en trígono con Mercurio y Saturno en trígono

con Marte.

Malos aspectos: Saturno en cuadratura con el Sol, la Luna y Venus; la

Luna en oposición con el Sol y Venus; Mercurio en cuadratura con Neptuno y

Marte en conjunción con Urano.

Analicemos primero la mente de esta mujer para obtener la clave de su

estado, porque la mente es el factor para producir la enfermedad así como curarla.

El lector puede llamar a esto “Ciencia Cristiana” 2 o cualquier otra cosa que la

parezca; el hecho real existe y ha sido empleado por todos los “curadores

capacitados y prestigiosos, tanto consciente como inconscientemente, no importa

a la escuela que pertenezcan, y hay más poder curativo en una palabra cariñosa y

optimista del médico en el cual el paciente tenga fe, que en todas sus medicinas.

Por el contrario, cuando el médico pierde la esperanza y se presenta mustio y con

cara larga, el enfermo se muere a menos que se “ponga loco” o “se anime a sí

mismo”, como ocurrió una vez a uno de los autores con ocasión de hallarse

agotado por exceso de trabajo. Entró en un hospital para ser atendido y descansar

y tuvo que llamar a un médico para cumplir con las reglas del establecimiento. El

enfermo sabía que su estado no cambiaría hasta que cambiara la Luna y

permanecía en cama aguardando pacientemente, aunque se estaba acercando

una crisis, porque su mente estaba muy aletargada para obligarla a trabajar y

confiando en que la Luna lo haría todo por sí sola en su tiempo oportuno.

Pero el día de la Luna nueva el doctor vino a su lecho con otro, y ambos

tenían las caras tristes y compungidas. Ellos pensaban que al enfermo no le

restaba una hora de vida y éste se rió de sus temores, pero le excitó su temor y el

mismo enfermo comenzó a tratarse a sí mismo, con el resultado de que la

hinchazón hidropésica, que casi había alcanzado el corazón, desapareció en unas

cuantas horas y al cabo de ellas el enfermo se hallaba fuera de su lecho, a la luz

del Sol, tomando una nueva dosis de vida. Antes de que hubiera transcurrido un

mes no sólo había abandonado el hospital, sino que había escrito La Filosofía

Rosacruz.

No hay duda de que el fluido no podía ser eliminado antes del cambio de la

Luna; pero la cooperación de su actitud mental era necesaria para favorecer a las

fuerzas lunares, y combinado con la manipulación debida trajo los resultados

apetecidos. De igual modo pasa en todos los casos; debe cultivarse la actitud

mental necesaria, o la cura será imposible.

Esta figura indica una persona desgraciada, porque su mente se halla en un

estado muy malo. Saturno está en cuadratura con el Sol, la Luna y Venus. La

Luna, que significa la mente instintiva, está en oposición con el Sol y Venus,

robando a la enferma vida y alegría, y haciéndola pesimista y llevándola a

considerar el lado obscuro de la vida. Mercurio, el planeta de la razón, está en

cuadratura con Neptuno, el planeta de la percepción espiritual, y todos estos

testimonios nos dicen que nada puede hacérsele que le haga volver alegre.

2 “Christian Science” (o Ciencia Cristiana) es el título de un movimiento religioso-filosófico

en Norteamérica.

Tal persona es una carga para sí misma y para sus allegados en la vida, de

modo que ellos la rehuyen cuando está en condiciones de cuidarse por sí sola, es

decir, cuando su cuerpo está gozando de una salud relativa; pero las aflicciones

que la hacen una piltrafa, mentalmente hablando, tienen también efectos sobre el

cuerpo, porque del mismo modo que nosotros moldeamos las líneas de nuestra

cara en la expresión exacta de nuestro modo habitual de pensar, así también los

otros órganos se amoldan y construyen por tal fuerza, y los efectos malos se

cristalizan en enfermedades. El Sol, Venus y Mercurio en la casa octava, indican

que cuando la enfermedad se acerca a ella se abandona a su desgracia y no hace

ningún esfuerzo para luchar por la vida.

La naturaleza de su enfermedad es sabido que es una afección cardíaca

por el hecho de que el Sol está en la cúspide de Leo, el cual gobierna el corazón,

en conjunción con Venus, que a su vez rige la circulación venosa, y en oposición

con la Luna, la cual gobierna los líquidos del cuerpo. El Sol, Venus y la Luna están

en cuadratura con Saturno, el planeta de la obstrucción, y por esto podemos ver

que había una tendencia natal a una acción deficiente del corazón y a la falta de

eliminación de líquidos.

En el año 1913 el Sol progresado alcanzaba la conjunción de Urano y

Marte. Los aspectos del Sol son siempre efectivos por tres años, año o año y

medio antes de que se forme el aspecto exacto y un lapso de tiempo parecido

después. Por lo tanto, tal aspecto del Sol estaba aún activo en el año 1914,

cuando la Luna progresada llegó a la conjunción de Saturno y de este modo

vivificando esta cuadratura del Sol, la Luna y Venus. Neptuno, el signo ácueo,

también alcanzó el Sol natal por tránsito, y la pobre alma quedó deprimida por tal

obstrucción de los líquidos; en otras palabras, el estado hidrópico detuvo el

corazón.

El esfuerzo principal en tales casos debiera dirigirse a estimular al enfermo

para que se defendiera de la enfermedad. Si esta paciente hubiera podido ver que

su consideración tenebrosa de la vida era la responsable de su enfermedad y que

si ella no luchaba en tal ocasión tendría necesidad de verse afligida por unas

condiciones peores la próxima vez, podría haber dado un buen resultado. Ninguna

persona que es pesimista puede cambiar en un día pero, sin embargo, puede

hacer mucho si cultiva una actitud mental optimista durante algunos años, y

nosotros nos debemos esforzar en inculcar a todos este optimismo y alegría,

además de esforzarnos en alegrarnos nosotros mismos, porque éste es el

factor más importante y mayor para la curación.

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del libro "El Mensaje de las Estrellas", de Max Heindel y Augusta Foss de Heindel